Diferencias entre el marketing digital y el tradicional

El orfebre alemán Johannes Gutenberg sentó las bases de la imprenta moderna en el siglo XV con su sistema de tipos móviles, letras talladas en metal que se combinaban para formar las palabras y las líneas de una página de texto. Este invento dio comienzo a una auténtica revolución cultural sin precedentes. Una revolución similar a la que ha experimentado la sociedad actual con la irrupción de internet, que también ha provocado importantes cambios sobre cómo se accede a la información y cómo se distribuye. Así mismo, esta transformación ha provocado importantes cambios en el sector del marketing, ya que la mayoría de los expertos están enfocados en hacer mailing online para tener una mayor presencia digital. Un marketing digital que cuenta con varias diferencias con el marketing tradicional.

El marketing tradicional, también conocido como marketing offline, se enfoca en la difusión de información sobre determinados productos y servicios mediante los medios convencionales, como son la televisión, la radio y la prensa. En cambio, el marketing digital (o marketing online) comprende todas las acciones y estrategias comerciales que se realizan a través de los medios digitales. Un fenómeno que comenzó en los años 90 con el objetivo de trasladar todas las técnicas aplicadas en el marketing tradicional al mundo digital. Más allá de estas técnicas clásicas, el marketing online ha evolucionado paralelamente utilizando nuevas herramientas para aprovechar todas las posibilidades que brinda el espacio online. Un proceso en el que las redes sociales han tenido un papel protagonista, ya que ha convertido a internet en una gran comunidad donde los usuarios intercambian información y opiniones con las marcas.

Una de las grandes diferencias entre el marketing online y el marketing tradicional es la comunicación con los consumidores. En el marketing offline, el contenido comercial se difundía de forma unidireccional, ya que en los medios tradicionales el usuario es completamente pasivo. Por su parte, en el marketing digital la comunicación es bidireccional y existe una interacción constante entre las marcas y los consumidores. Esta interacción inmediata permite a las compañías establecer una relación de confianza con sus clientes y potenciales clientes, aumentando la credibilidad de la marca en el mercado. Una comunicación que se debe principalmente a la segmentación que se realizada en la actualidad, basada en los intereses de los consumidores, así como en sus características demográficas. Todo ello gracias a las publicaciones que realizan los usuarios en las redes sociales, plataformas que detectan los comportamientos de estas personas para configurar filtros específicos.

Otra de las diferencias más importantes la encontramos en la capacidad de medición y análisis que ofrece el marketing digital. Internet permite a las empresas trabajar con herramientas que miden cada acción que los usuarios realizan en el mundo digital para investigar el mercado y conocer los intereses de los consumidores. De hecho, todas las plataformas en las que se lanzan las campañas de marketing online aportan útiles informes sobre el impacto que han tenido sobre los usuarios. Un conjunto de variables impensables en el marketing tradicional, que, aunque se valía de diversos recursos para medir el impacto de las campañas, no se podían obtener los datos de una forma tan inmediata como ocurre en la actualidad.